Boda de Federico de Dinamarca y Mary Donaldson
Copenhague vivió con ilusión uno de los actos más emotivos del año, la boda entre Federico de Dinamarca y Mary Donaldson.Vestido de almirante, el novio hizo su entrada en la catedral, acompañado de su hermano y padrino, Joaquín de Dinamarca.
El príncipe heredero derramó algunas lagrimas al ver aparecer a Mary Donaldson.
La futura reina danesa lució un vestido blanco nacarado, obra del diseñador Uffe Frank. Mención especial merece el velo que lució Mary, una pieza de encaje con más de cien años de antigüedad.
La ceremonia duró una hora y fue oficiada por el rito luterano. Una vez convertidos en marido y mujer, los novios recorrieron las principales calles de Copenhague en coche de caballos. El recorrido finalizó en el Palacio Real, desde cuyo balcón Mary y Federico saludaron a todos los ciudadanos allí congregados.
El banquete nupcial se celebró en el Palacio Fredersbong. Los ochocientos invitados al enlace degustaron un menú compuesto de tres platos, tarta nupcial y regado con vinos del castillo que la familia real danesa tiene en Caix, Francia.
A medianoche, como en los mejores cuentos, los novios abrieron el baile con un vals. La fiesta duró hasta altas horas de la madrugada.
Fuente: www.todoellas.com
